Un portal recoge los sonidos de la cotidianidad boliviana

"Dólares, dólares, dólares", grita una vendedora de la Feria de Alasita. Su voz sobresale entre el bullicio de la gente y los petardos que retumban para celebrar el inicio de la fiesta de la miniatura.

Ésta y otras decenas de grabaciones de situaciones rutinarias y comunes en diferentes espacios del país pueden escucharse en la página www.paisajessonorosbolivia.com, que se habilitó recientemente en la web.

"El proyecto Paisajes sonoros busca recuperar la memoria sonora de Bolivia. Hasta la fecha tenemos más de 100 horas de registro de sonidos de La Paz, Cochabamba y Santa Cruz", explicó el músico Óscar García, quien dirige y produce esta iniciativa desde su estudio Pro Audio.

El Museo Nacional de Etnografía y Folklore (MUSEF) tiene un archivo sonoro que rescata, principalmente, la música autóctona de las diferentes culturas del país. A diferencia de esta colección, Paisajes sonoros nació con la idea de preservar los sonidos cotidianos de las ciudades y de sus personajes.

"En Bolivia tenemos museos que conservan fotografías o hemerotecas que guardan diarios, pero hasta hoy no había un espacio serio para salvar los sonidos que producen nuestras ciudades", dijo García.

Inicialmente se toman registros en el eje troncal "porq ue en esas ciudades hay un gran movimiento", aunque García indicó que en el futuro se prevé extender el trabajo a las otras capitales del país.

Además de la fiesta de Alasita, en el caso de La Paz, la página rescata los sonidos de un desfile cívico, de la fiesta del Gran Poder, del antiguo mercado Lanza y de la plaza Eguino, entre otros.

En el caso de la Llajta, García comentó que se tienen muestras de sonidos que se produjeron en el paseo de El Prado, mientras que en Santa Cruz se grabó en lugares emblemáticos como la plaza 24 de Septiembre.

Cada audio tiene una ficha técnica en la que se detalla el lugar y la fecha de registro.

El proyecto, explicó el músico, comenzó en 2005 como resultado de una investigación "sobre los conceptos que se tiene en Bolivia del paisaje sonoro".

Si bien esta iniciativa surgió hace ocho años, el productor comenzó el registro de sonidos hace más de dos décadas, por lo que en el sitio hay material producido a inicios de los años 90.

"Este registro es importante para el país -asegura- porque permite, al igual que una imagen, perpetuar un suceso. Los sonidos como las imágenes tienen capacidad informativa, evocan y producen recuerdos".

Nicolás Suárez, músico y compositor, resaltó esta iniciativa gestada por García. "Mediante los sonidos podemos conocer a detalle las expresiones culturales de un determinado lugar", dijo.

ACCESO

Las grabaciones de Paisajes sonoros están disponibles en formato MP3 y la gente puede descargarlas libremente, siempre que su uso sea sin fines de lucro.

"En caso de que los audios sean usados para publicidades u otros fines comerciales, se tendrá que pagar un monto determinado", explicó García.

El único país en la región que tiene una sonoteca especializada es México. "Ese centro tiene un archivo serio y sistematizado sobre su producción sonora", contó el productor y resaltó que este centro dispone de técnicas modernas para conservar y difundir los audios.

García invitó a la gente a contribuir al archivo de Paisajes sonoros con sus grabaciones particulares. "Esperamos que este proyecto impulse en el futuro la creación de una sonoteca", dijo.